La educación en línea ofrece un nuevo escenario para el aprendizaje

La inteligencia artificial y la inteligencia humana en el ámbito educativo

Las tecnologías están democratizando el acceso a la educación. Hoy existe la posibilidad de aprender desde casa, en movimiento. La flexibilidad y un camino de aprendizaje personalizado son la clave.

Además, la inteligencia artificial o IA ya está permitiendo la personalización del material educativo en función del historial de aprendizaje de cada persona. En un futuro cercano, esto permitirá a los docentes dedicar menos tiempo a evaluar a sus alumnos y más tiempo a eliminar las barreras para aprender y hacer lo que los humanos hacemos mejor: adaptarse a las necesidades a nivel emocional. Creo que, en lugar de centrarse en tareas administrativas y docentes de nivel inferior, los educadores podrán pasar la mayor parte de su tiempo en un entorno similar al de un entrenador: conectándose con sus alumnos y eliminando los obstáculos de aprendizaje de su camino. Con el apoyo de la tecnología, estos educadores establecerán metas y realizarán el potencial de sus estudiantes.

Complementar la experiencia humana con tecnología de punta para ofrecer la combinación perfecta de aprendizaje es fundamental para preparar a los alumnos para conversaciones reales. Por lo tanto, en mi opinión, la inteligencia humana seguirá siendo el centro del escenario, así como el enfoque en el usuario individual.

Centrarse en cada usuario significa mucho más que generar un compromiso de ellos. Significa crear contenido que los represente y los acoja. Babbel enfatiza esto en la creación de las directrices de Diversidad, Equidad e Inclusión –DEI– y su adaptación a los flujos de trabajo del producto, asumiendo la responsabilidad de crear contenido diverso, inclusivo y equitativo en sus productos de aprendizaje de idiomas en línea.

Considero que las empresas de consumo del futuro y del presente deben tener clara su responsabilidad de generar un espacio seguro para sus usuarios y estar preparadas para resolver problemas reales. La tecnología no es neutral y, en cambio, puede servir como un medio para lograr el bien social. En Babbel, vemos esto como parte de nuestra promesa e integrado en nuestro producto y empresa.

La importancia de la formación en idiomas hoy

Algunos podrían pensar que aprender un idioma solo es útil para pedir direcciones o la factura durante las vacaciones o como una viñeta a incluir en su CV. Sin embargo, aprender un nuevo idioma no es solo una habilidad transaccional, es una actividad que cambia la vida y una habilidad profundamente personal. Abre una gran cantidad de posibilidades, como mudarse al extranjero para un nuevo trabajo o conocer a una persona importante que no habla su idioma nativo, solo por nombrar algunas.

Además, un idioma es una mirada íntima a otra cultura y puede profundizar nuestra comprensión de los valores y la historia de otras personas. Por tanto, los idiomas cambian la forma de ver a los demás, a las nuevas sociedades y, en definitiva, al mundo. Nos permiten crear entendimiento mutuo a través del lenguaje.

Otros aspectos importantes son la pasión y la alegría asociadas con hablar un nuevo idioma, así como los beneficios para la salud mental y física (desde entrenar tu cerebro y mejorar tu memoria, hasta la satisfacción y recompensa que sientes después de haber hecho algún progreso). Por lo tanto, la formación en idiomas es y será siempre sumamente importante para la vida personal y de la comunidad.

Sobre el autor: Thomas Holl es cofundador y director de tecnología (CTO) de la plataforma en línea de enseñanza de idiomas Babbel. Es responsable de guíar la estrategia y supervisar a todo equipo de TI de la compañía, así como desarrollar nuevas tecnologías centradas en la experiencia de usuario con la misión de ayudar a los clientes a alcanzar sus objetivos de aprendizaje online alrededor del mundo. Anteriormente, se desempeñó como director de estrategia (CSO), liderando las iniciativas de nuevos negocios y presidente de Babbel, liderando la expansión en América del Norte. Antes de esto, cofundó una empresa en el campo del software musical, que luego vendió a Native Instruments.