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Datos de IoT en la nube y en el borde
Con más datos generados en el borde, transferirlos todos a la nube puede no ser una opción viable. Ahí es donde entra la nube de borde.
El año 2020 aceleró la transformación digital, y la tecnología de la nube se ha vuelto más frecuente. De hecho, en el último año hemos visto un rápido crecimiento en la convergencia de las funciones de TI, la nube y la seguridad de las empresas, en parte debido a la pandemia de COVID-19. Las organizaciones han adoptado una mentalidad más oportunista y buscan capitalizar las ventajas de conectarlo todo mientras siguen abordando los retos actuales.
Con la conectividad cada vez más necesaria –especialmente con muchas personas que trabajan desde casa–, los dispositivos se conectan a internet y entre sí más que nunca. La transformación digital y la necesidad de que varios dispositivos se comuniquen y compartan datos ya no es agradable, sino esencial. Los datos transmitidos por los dispositivos IoT son fundamentales para optimizar el negocio, analizar patrones y comprender las tendencias que afectan a las operaciones diarias.
Esto nos lleva a la actualidad. Ahora, existe una relación integrada entre IoT y la nube. La nube almacena los datos de IoT y se puede acceder a ellos en cualquier momento y en cualquier lugar, por lo que es ideal para múltiples ubicaciones u operaciones dispersas. Combinadas, las soluciones de IoT y la nube apoyan la captura de datos con control en tiempo real y monitoreo de inteligencia.
Los sistemas en la nube pueden ayudar a las organizaciones a explotar los datos de IoT –incluidos los datos de video– utilizando la IA. La inteligencia incorporada da lugar a operaciones más sencillas, mayores eficiencias y procesos más racionalizados. La IoT lo hace posible. Hace posible que los sensores inteligentes capturen datos y luego analicen la información para enviar una notificación cuando se ha producido un evento. El tipo de sensores puede ser de seguimiento meteorológico, sistemas de gestión de edificios, videovigilancia, supervisión del tráfico, control de acceso y análisis.
Combinar la nube y la IoT es una opción deseable para muchas empresas, pero ¿qué pasa con aquellas que no tienen el ancho de banda o la capacidad de soportar una infraestructura de nube pura? Hoy en día, las organizaciones también pueden considerar las opciones híbridas para pasar a la nube de una manera más estratégica, rentable y con un ancho de banda más fácil.
Los productos de nube de borde están diseñados para ofrecer una funcionalidad de nube personalizada basada en prioridades de seguridad, riesgos y requisitos operativos específicos. También abordan algunos de los retos a los que se enfrentan las partes interesadas al considerar las opciones basadas en la nube, como los problemas de internet, el elevado número de dispositivos IoT y la optimización del tráfico de red. Con una opción de almacenamiento en el borde, los usuarios finales pueden configurar sus opciones de almacenamiento de forma que se reduzca el ancho de banda y el costo y se aceleren sus objetivos de transformación digital. Las opciones híbridas también incorporan la oportunidad de pasar completamente a la nube en el futuro.
Razones para optar por lo híbrido con nubes de borde
Pero la pregunta es: ¿cuándo es ideal el almacenamiento perimetral para los despliegues de IoT? Depende de sus necesidades empresariales, operativas y de seguridad. Veamos algunos de los parámetros que pueden afectar a la decisión de una empresa de seleccionar la nube de borde.
Cumplimiento y almacenamiento
Muchos sectores, como el del juego y el del cannabis, se enfrentan a requisitos normativos específicos para conservar los datos de IoT durante un periodo de tiempo determinado. Aunque el tiempo de retención varía en función de la aplicación, la información debe ser fácilmente accesible si se necesita para una investigación o revisión. El almacenamiento en la nube de borde permite a los operadores personalizar los tiempos de retención en toda la instalación o en cada dispositivo específico y asignar dónde almacenar los datos. En general, este enfoque ofrece más flexibilidad y permite a los usuarios cambiar la configuración según sea necesario.
Crecimiento de las redes de dispositivos IoT
Con la proliferación de IoT, podemos esperar que los despliegues de dispositivos conectados sigan creciendo, y que haya más sitios con más dispositivos. Este hecho conduce a más datos capturados y a una demanda de más almacenamiento. Se espera que el mercado de la videovigilancia, que es el que más datos de IoT produce, crezca hasta los 86.530 millones de dólares en 2027, según la empresa de investigación y consultoría Emergen Research.
El almacenamiento de video en el borde, por ejemplo, liberará el ancho de banda y proporcionará a los usuarios la flexibilidad de la nube sin afectar al ancho de banda de red necesario para satisfacer las demás necesidades de red y de negocio de la organización.
Trabajar desde casa
Cuando las redes empresariales se amplían añadiendo nuevas instalaciones corporativas o más empleados que trabajan desde otras ubicaciones remotas, la configuración y el mantenimiento de las plataformas locales pueden dificultar la supervisión eficaz de las operaciones. La nube de borde puede gestionar operaciones dispersas y remotas sin la necesidad adicional de un gran ancho de banda. El uso de la nube de borde también permite ver y gestionar las ubicaciones dispersas a través de una única plataforma desde cualquier lugar y en cualquier momento.
Fuerza de la red
Las exigencias de ejecutar múltiples programas basados en la nube pueden ser un reto para los líderes de TI que buscan garantizar que la red sea segura y accesible. Pero, a veces, la demanda crea la necesidad de optimizar la red y maximizar su rendimiento para las operaciones de salida. Los datos de IoT que se suben directamente a la nube pueden atascar la infraestructura de TI para otras funciones. Por lo tanto, el almacenamiento de los datos de IoT seleccionados en el borde se convierte en un siguiente paso necesario para ayudar a los departamentos de TI a mantener el tiempo de actividad de la red.
Sobre el autor
Como CEO de Arcules, Andreas Pettersson lidera el equipo de la empresa en la creación de la categoría de video como servicio basado en la nube para empresas. Antes de convertirse en CEO, Pettersson fue CTO desde la formación de la empresa en 2017. Es un líder ejecutivo con más de 10 años de experiencia en desarrollo de negocios internacionales, ingeniería y liderazgo en gestión de productos.