Reevaluar el talento tecnológico en la era del análisis de datos
El uso y análisis de datos también se ha vuelto común en las empresas para valorar el rendimiento individual de sus colaboradores y garantizar evaluaciones justas y sin sesgos.
La industria tecnológica avanza rápidamente, intensificando la competencia por captar y retener a los mejores talentos. Bajo la sombra de la brecha de talento que existe en la región, las empresas en Latinoamérica deben reinventar sus estrategias de gestión de talento, ya que atraer a desarrolladores con gran potencial no es suficiente. El desafío de ahora consiste en evaluarlos, promoverlos y convertirlos en líderes tecnológicos.
Double V Partners (DVP), firma especializada en disrupción digital, considera que el valor de un equipo radica en la capacidad que tiene para adaptarse a un entorno dinámico. Por esto, la empresa ha implementado un sistema que mide la productividad, promueve el alineamiento estratégico y fomenta el crecimiento profesional, basado en la capacidad individual de cada miembro del equipo, la cual depende de su propio seniority.
Para valorar el rendimiento, se ha vuelto común el uso y análisis de datos para dicho fin, y las empresas están adoptando enfoques que permiten medir el desempeño individual en comparación con niveles anteriores, garantizando una evaluación justa y libre de sesgos.
“Creamos la Política de Rendimiento Neto, la cual consiste en un método de medición que permite evaluar a los desarrolladores en función de su nivel. Esta política define las reglas y condiciones para la medición del rendimiento de los desarrolladores, y las implicaciones de tener un alto o bajo rendimiento”, explica Daniel Villa Camacho, CEO de Double V Partners.
Esta estrategia se ha desarrollado combinando análisis de datos automatizados con metodologías ágiles –como Scrum– para optimizar la gestión de proyectos y el seguimiento continuo del rendimiento, facilitando la identificación de riesgos y las oportunidades de mejora. En contextos donde la demanda de profesionales ha aumentado considerablemente, medir la capacidad individual a partir de su nivel resulta esencial.
En México, el “Informe sobre el Futuro del Empleo 2023” del World Economic Forum proyecta que el 2 1% de los trabajadores cambiarán de empleo en los próximos cinco años. Los roles clave incluyen especialistas en inteligencia artificial (IA) y aprendizaje automático, con un crecimiento proyectado del 40 %, seguidos de especialistas en big data (38 %) y desarrolladores de aplicaciones y analistas de inteligencia de negocios (35 %).
Villa señala que, con la aplicación de herramientas y sistemas automatizados, las empresas pueden superar los desafíos técnicos y de resistencia al cambio que pueden tener los colaboradores, en cuanto a la medición del rendimiento. El reto debe ser abordado de manera temprana, explica el ejecutivo, y debe incluir las políticas de medición de rendimiento en los procesos de onboarding de nuevos miembros del equipo y reforzar la adopción del modelo en sesiones de trabajo.
El CEO de Double V Partners comenta que, cuando lanzaron la iniciativa de forma oficial, la acompañaron “de sesiones de socialización y un ‘primer mes de prueba’, para que los desarrolladores entendieran la dinámica y se adaptaran sin temor a las implicaciones negativas en caso de no cumplir lo esperado”.
El análisis de datos ha contribuido a crear un ambiente de trabajo más inclusivo y equitativo. Al reducir sesgos y proporcionar una base objetiva para las evaluaciones, se puede asegurar que todos los miembros del equipo tengan iguales oportunidades de desarrollo y promoción, y que se pueda detectar oportunamente las necesidades de formación, motivación o acompañamiento de quienes tengan un rendimiento debajo de lo esperado.
La tendencia hacia el análisis de datos en la gestión del talento tecnológico ha crecido, impulsada por la necesidad de alinearse con los objetivos estratégicos y preparar a la próxima generación de líderes tecnológicos. “Además de ofrecer información sobre el desempeño de los desarrolladores, hemos podido identificar riesgos y oportunidades de mejora respecto al cumplimiento del alcance, el cronograma y el presupuesto de los proyectos”, apunta Daniel Villa.
Eso subraya que, en los procesos de gestión del talento actuales, un enfoque basado en datos puede ser una herramienta eficaz para la transformación organizacional, concluye el ejecutivo.