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Modernizar aplicaciones permite adaptarse a demandas de negocios
Para obtener todos los beneficios de la modernización de aplicaciones, se requiere ir más allá de la tecnología, evaluar correctamente el punto de inicio y elegir una metodología adecuada.
La digitalización ha hecho de las soluciones y servicios en la nube una necesidad para los negocios, haciendo relevante para las empresas evolucionar y contar con aplicaciones y tecnologías que faciliten el día a día de empleados, líderes, clientes y usuarios.
Esta demanda pone foco en la importancia de contar con sistemas operativos constantemente actualizados, reformulando cómo la industria opera y resuelve la deuda técnica, es decir, la curva de adaptación a nuevas tecnologías. Este escenario promueve la implementación de una estrategia de modernización de aplicaciones para reducir silos operativos, potenciar la agilidad empresarial y optimizar los costos de mantenimiento.
Entre los beneficios de aplicar este tipo de estrategias, DXC Technology señala que se encuentran el aumento de productividad, la optimización de flujos de trabajo, la eliminación de duplicación de tareas y la mejora de la colaboración entre los empleados.
Para alcanzar los objetivos de modernización empresarial exitosamente, DXC Technology comparte algunos factores claves:
- Modernizar más allá de la tecnología. Las iniciativas de modernización se han percibido como un desafío tecnológico en el que muchas empresas intentan y fracasan a la hora de completar sus proyectos. Sin embargo, para que la modernización sea exitosa implica contar una buena planificación que incluya la cultura organizacional, la gestión del cambio, el control de costos y las relaciones comerciales, teniendo en cuenta las necesidades de negocio actuales y anticipando las futuras.
- Evaluación y prioridades. Ningún proceso de modernización es igual, lo que hace fundamental identificar el sistema y aplicaciones con las que se cuentan, y que se quieren actualizar, para alinearse con las expectativas y los objetivos del negocio. La empresa señala que las formas más rápidas que tiene un negocio para simplificar sus TI son: refrescar la tecnología, soluciones como servicio, racionalización de aplicaciones, optimización continua, automatización inteligente y salida del centro de datos.
- La metodología es clave. Lo ideal en un proceso de modernización de aplicaciones, señala DXC Technology, es invertir en fábricas de modernización que se guíen con metodologías que puedan ajustarse a los planes y requisitos en función de la retroalimentación, con soluciones rápidas y flexibles. Esto, por medio de la colaboración entre los equipos de desarrollo, operaciones y seguridad a través de herramientas automatizadas que se despliegan rápidamente en producción.
“La modernización de aplicaciones es, en esencia, un proceso de mejora continua antes que una transformación radical. Una de las ventajas clave es su capacidad para automatizar procesos y simplificar tareas rutinarias, con lo que libera tiempo y recursos que pueden ser redirigidos hacia actividades más estratégicas, permitiendo una mayor precisión en las operaciones y reduciendo el riesgo de errores humanos”, señalaron desde la empresa.