Invertir en privacidad puede ser un buen negocio para las empresas
De acuerdo con un estudio realizado por Cisco, las empresas tienen retornos de inversión en temas de seguridad de hasta 300 % gracias a las ventas que generan basadas en la confianza del consumidor.
Como desde hace algunos años, el 28 de enero se celebró el Día Internacional de la Protección de Datos y hoy, más que nunca, nuestra sociedad tan digitalizada requiere que esta información esté bajo buen resguardo.
¿Pero, que están haciendo las empresas para proteger este bien tan preciado? Bajo esta premisa, Cisco presentó, a través de su director senior de Asuntos Gubernamentales para América Latina, Mario de la Cruz, su «Estudio sobre Privacidad de Datos 2022» (Data Privacy Benchmark Study 2022) que contó con la participación de 4.900 profesionales de 27 países, incluyendo México.
De la Cruz resaltó que la privacidad se ha vuelto un tema de misión crítica en todas las organizaciones. «Hemos visto cómo se ha venido profundizando desde hace varios años, pero, sobre todo, se ha acelerado a partir de la pandemia que estamos viviendo. Vemos cómo el concepto de privacidad está impactando en distintos elementos que se ven dentro de las organizaciones, desde los ciclos de ventas, las métricas en el manejo de la administración de las distintas empresas y los propios conceptos de seguridad. También está impactando en el tema de las habilidades de los empleados, particularmente de aquellos que son responsables de las áreas de seguridad entre las organizaciones», dijo.
Igualmente, los consumidores están dando una importancia vital a la privacidad de sus datos. «La privacidad se ha convertido en un aspecto de compra o no para ellos, a medida que saben el grado particular de transparencia en el que se manejan los datos personales. [También] los consumidores han expresado preocupación con relación al manejo de los datos personales y la inteligencia artificial, y termina por ser un elemento de toma de decisión para el consumo», señaló el ejecutivo.
De hecho, de acuerdo con los datos del estudio, 90 % de los consumidores manifestó que si no existe una protección adecuada de sus datos no van a realizar compra alguna. Por eso, posiblemente, las certificaciones en materia de privacidad se están volviendo un factor de decisión en la compra de un producto en 91 % de las veces.
En México, el 93 % de los consumidores dicen que no comprarían si no saben cómo se están protegiendo sus datos; en el caso de Brasil, es 91 %; Chile, 86 %; y en Colombia ese porcentaje se va al 89 %. «La seguridad y las certificaciones a nivel país se están volviendo un factor cada vez más importante cuando el consumidor va a seleccionar un producto o un proveedor de servicios», comparte Mario de la Cruz.
El grado de conciencia que ha generado el manejo de la privacidad de datos se ha reflejado en la manera en que los consumidores y los profesionales están valorando positivamente el impacto que tiene la existencia de distintas leyes de privacidad en los países de la región. De la Cruz ve rangos muy altos: «México tiene un porcentaje de aceptación de las leyes de privacidad de la Ley de Protección de los profesionales de 92 %; Colombia, Chile y Brasil tienen porcentajes superiores al 80 % y, en general, a nivel global el promedio que encontramos fue de 83 %. Los profesionales están viendo que estas leyes en materia de protección de datos personales están generando un impacto positivo».
Un aspecto significativo para las empresas es que el retorno de inversión (ROI) en privacidad sigue siendo alto por tercer año consecutivo, con mayores beneficios para las pequeñas y medianas empresas. De esto, de la Cruz, resaltó que «más del 60 % de los encuestados consideran que están obteniendo un valor empresarial significativo de la privacidad, especialmente cuando se trata de reducir los retrasos en las ventas, mitigar las pérdidas derivadas de las violaciones de datos, permitir la innovación, lograr la eficiencia, crear confianza con los clientes y hacer que su empresa sea más atractiva».
Mucho de lo anterior tiene una amplia relación con que las métricas, en materia de privacidad, han adquirido una gran relevancia dentro de las organizaciones: el 94 % de estos profesionales de seguridad reportaron que están informando a sus consejos de administración y a sus grados superiores en las organizaciones distintas métricas en materia de privacidad. «Estamos hablando de auditorías y de otras métricas, como por ejemplo las evaluaciones de brechas de seguridad y de los impactos que puedan llegar a tener», indicó.
Al mejorar en todos sus procesos, las empresas no solamente atraen nuevos clientes, sino que también generan eficiencias operacionales, volviéndolas más ágiles, promoviendo la innovación. «Si bien no son sinónimos, la ciberseguridad y la privacidad son conceptos que van de la mano. Al implementar medidas que protegen la privacidad de los datos, estamos incrementando la ciberseguridad en las organizaciones; eso se traduce en una reducción en las pérdidas y, por supuesto, también en reducir retrasos de ventas», consideró el ejecutivo.
Todas las variables de la protección de datos se pueden llegar a monetizar a través del retorno de inversión, y algunas organizaciones ya lo están haciendo, porque estos ROI son muy claros. Un dato interesante compartido De la Cruz es que el 80 % de empresas están viendo retornos de hasta una vez su inversión; «el 50 % de los encuestados nos está declarando retornos a la inversión de entre una y 2 veces, es decir, entre 100 % y 200 % de retornos a la inversión; el 18 % nos da retornos de entre 200 % y 300 % de la inversión hecha; y 7 % para los retornos que son superiores al 300 %. Entonces, vemos que la privacidad no solamente es un imperativo para las empresas, es un buen negocio invertir en materia de privacidad», concluyó.