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2021 es un año de reformulación para América Latina

Seguridad, inteligencia, nube, modernización de ERP y experiencia del cliente serán las prioridades de inversión del mercado TI para 2021, y el sector público tendrá un mejor desempeño en la industria de TI que el año pasado, señala IDC.

El 2021 es un año de reformulación, lo cual puede ser mejor para el sector de las TI en la medida en que las organizaciones hayan reajustado su estrategia, afirmó Ricardo Villate, vicepresidente de grupo para Latinoamérica de la firma de analistas IDC.

Dentro del marco de su evento IDC LA Tech CMO Forum: Reformulate 2021, Villate indicó que, para que este año sea más favorable respecto al anterior, en el que la economía regional se contrajo 8,1 %, se deberían cumplir tres condiciones:

  1. Reformular las soluciones: Los objetivos son diferentes, así como los procesos. Las compañías requerirán ajustar la mezcla de productos que ofrecen para adecuarse a las soluciones que se demanden. Se deben incorporar tecnologías más móviles a una estructura de cómputo mejor distribuida donde los puntos de trabajo remoto prevalecen.
  2. Reformular el mensaje: Aun cuando la inversión continúa, las razones están cambiando. El mensaje de valor debe adaptarse a las necesidades vigentes y a la agenda actual del CEO. El realineamiento debe revisarse con mayor frecuencia dada la aceleración digital que vivimos.
  3. Preparar a la fuerza de ventas y al canal: En 2021, la mezcla adecuada de competencias físicas y emocionales de ventas se vuelve cada vez más digital. Configurar herramientas para acelerar el proceso de ventas puede ayudar a robustecer las competencias.

Villate también apuntó que la nube, uno de los componentes más críticos de la plataforma digital, estalló en uso en 2020 y opinó que los efectos residuales de los cambios dramáticos en el consumo y la interacción aún están por verse. «La nube es cada vez más algo menos aislado. Por ejemplo, hoy en día, seguridad e inteligencia son también cloud. La nube poco a poco está dejando de ser solo cloud, convirtiéndose en algo que está en todas partes», afirmó.

Por otra parte, el analista señaló que las prioridades de inversión del mercado de las TI en 2021 serán: la seguridad, la inteligencia (analítica, inteligencia artificial y aprendizaje automático), la nube (IaaS y SaaS), la modernización de ERP y la experiencia del cliente.

Asimismo, se refirió a la empresa futura, que representa la nueva agenda del CEO para la nueva normalidad y que incluye nueve puntos: el futuro de las operaciones, el futuro del trabajo, el futuro de la inteligencia, el futuro de la infraestructura digital, el futuro de la conectividad, el futuro de clientes y consumidores, el futuro de la innovación digital, el futuro de la confianza, y el futuro de los ecosistemas industriales.

Proyecciones para el sector público y otras industrias

En otro momento del foro, Alejandro Floreán, vicepresidente de consultoría y estrategia de IDC Latinoamérica, detalló que, en 2021, jugarán un papel muy importante las tecnologías de alto impacto como la nube, la inteligencia artificial y las soluciones RPA, y dijo que cree que la experiencia del ciudadano debería ser mucho más inclusiva en temas de tecnología.

A su vez, Edgar Fierro, gerente general y vicepresidente de IDC México, vaticinó que este año el sector público va a tener un mejor desempeño en la industria de TI que en el 2020, cuando invirtió, en respuesta a la pandemia, solo un porcentaje de los recursos que tenía previstos para este sector (la inversión pública en TI cayó 20 %). El ejecutivo consideró que debe producirse una modernización del sector público, que incluya actualizar los sistemas legales, brindar una mayor transparencia y garantizar la privacidad de la información, tanto de las personas como las organizaciones.

En cuanto al sector educativo, Oscar Guzmán, gerente de consultoría de IDC Latinoamérica, mencionó que en 2021 se debe considerar las condiciones del ecosistema educativo en la región. Será relevante tomar en cuenta datos como el porcentaje de penetración de internet en los hogares, cuyo en América Latina es de 50 % y de 38 % en Centroamérica y el Caribe, aunque en Chile llega a 58 %.

En ese sentido, Guzmán resaltó la importancia de considerar implementaciones tecnológicas que empoderen las capacidades de los profesores y de los padres de familia. A su juicio, los operadores de telecomunicaciones deben acompañar a las instituciones educativas para identificar cuáles son las necesidades del alumno, considerando su entorno familiar y social, así como el nivel educativo.

Para el sector bancario, las proyecciones para este año de Víctor Almandoz, gerente de consultoría para IDC Latinoamérica, son un crecimiento en los pagos de servicios corporativos y pagos interfronterizos en 22,4 %, un aumento en las amenazas digitales del 21,8 %, y un salto en los reclamos de robótica y en la detección de amenazas cibernéticas de 20,7 % y 20 %, respectivamente.

Almandoz señaló que la banca fue una de las industrias inmediatamente afectadas por la pandemia en 2020, por lo que debió robustecer sus telecomunicaciones. Esta vertical debió asegurarse de que su sistema de seguridad tuviera la fortaleza necesaria para adecuarse a la nueva normalidad, y adquirir herramientas de colaboración remota para la continuidad de sus operaciones.

En salud, Waldemar Schuster, gerente de servicios de TI de IDC Latinoamérica y experto en salud, proyecta que se registrará una mayor inversión no solo en la administración de activos hospitalarios, si no también en el soporte administrativo de infraestructura de las redes hospitalarias nacionales para facilitar y habilitar los servicios digitales. El 2020, dijo, mostró la importancia de la medicina preventiva y la relevancia, en términos de tecnología, de la telemedicina y del monitoreo remoto de salud. De acuerdo con sus previsiones, el crecimiento del soporte a infraestructura será cercano al 8 % para 2021 y la intensificación de la comunicación y colaboración con clínicas vendrá de la mano del monitoreo de salud remoto.

La nube seguirá siendo el centro de la digitalización

Las organizaciones de América Latina deben fijar sus objetivos considerando su madurez en materia de digitalización, respecto a la confianza digital (Trust) que es clave en el proceso de generación de valor. Así lo señaló Carlo Davila, analista senior de soluciones empresariales de IDC Latinoamérica, durante el foro de la consultora.

El experto indicó que, a medida que las organizaciones aumenten su consumo de servicios en la nube, la seguridad también cambiará los modelos de adopción con un claro impacto en las oportunidades para ajustarse al crecimiento en la adopción de IaaS (39 %), PaaS (47 %), SaaS Apps (25 %) y SaaS Infra (29 %), dejando a la seguridad en la nube con una cuota del 20 % sobre la inversión total en productos de seguridad.

Si bien queda claro que la nube es la plataforma principal para la mayoría de las iniciativas, y hay un predominio de la solución híbrida en América Latina, actualmente hay más ofertas de aprovisionamiento local en más geografías y todos los segmentos están moviendo sus sistemas centrales a la nube pública, contó Pietro Delai, gerente de soluciones de nube de IDC Latinoamérica. Por ello, señaló el experto, la penetración de la nube pública en la región se sigue intensificando.

En lo que se refiere al borde o perímetro, Diego Anesini, director de soluciones empresariales de IDC Latinoamérica, estimó que hay una gran oportunidad de aprendizaje debido a que el concepto aún se está desarrollando en América Latina. Anesini identificó que la coyuntura de la región favorece el desarrollo de ecosistemas, poner foco en industrias clave y crear nuevas oportunidades a medida que más empresas adopten el enfoque de borde.

Finalmente, Jay Gumbiner, vicepresidente de investigación de IDC Latinoamérica, expresó que repensar la forma en que se hace el trabajo será otra tendencia de 2021. El ejecutivo observó la necesidad de un cambio fundamental en el modelo de trabajo hacia uno que fomente la colaboración hombre-máquina, permita nuevas habilidades y experiencias de los trabajadores, y apoye un ambiente de trabajo sin límites de tiempo o espacio físico.

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