Nota del editor

Como su nombre lo indica, el cumplimiento es la capacidad de cumplir —a veces más, a veces menos— con normas o regulaciones exigidas a las empresas por diferentes organismos, marcos o legislaciones. ¿Y qué tienen que ver con el riesgo y la gobernanza? Todo, puesto que muchos de esos marcos se dirigen a (y exigen) mejorar la forma de administrar los riesgos informáticos, y requieren la aplicación de una adecuada gobernanza de datos y procesos.

Con la cantidad cada vez mayor de riesgos por gestionar, la necesidad de proteger datos personales y sensibles recogidos y manejados por las empresas, y la mayor conexión de los sistemas informáticos (con el correspondiente aumento de la superficie de ataque), el cumplimiento corporativo se ha ido volviendo más completo y complejo.

Esta guía esencial le ofrece algunas de las principales tendencias que debe tener en cuenta para estar al día en materia de cumplimiento normativo, así como algunos consejos prácticos para su implementación.