HCI e infraestructura convergente son la base para la nube híbrida
No todas las aplicaciones y cargas de trabajo pueden o deben moverse a la nube pública. Según advirtió IDC, hasta el 50% de las cargas de trabajo en la nube pública podrían repatriarse a nubes privadas o infraestructura local, y una encuesta de Enterprise Strategy Group lo confirma: 77% de 1200 organizaciones han repatriado sus cargas de trabajo comerciales de misión crítica desde la nube pública a sus centros de datos.
IDC explicó que hay cinco razones por las que las organizaciones prefieren alojar cargas de trabajo en una nube privada frente a una pública, incluyendo la seguridad, restricciones normativas o políticas internas, requisitos de latencia con otras aplicaciones que no se pueden mover a la nube pública, requisitos de latencia con entidades físicas en las instalaciones, y el costo total de propiedad (TCO).
Por su parte, Evaluator Group descubrió que alojar una gran cantidad de infraestructura de escritorios virtuales (VDI) en las instalaciones en una infraestructura convergente era más atractivo desde el punto de vista financiero que en la nube pública.
Debido a que las organizaciones están repatriando cargas de trabajo comerciales críticas desde la nube pública a sus centros de datos y utilizando más nube pública, los equipos de TI deben reinventar la nube como un híbrido de infraestructura como servicio (IaaS) en la nube pública y la nube privada local.
De hecho, de acuerdo con un estudio de IDC de 2020:
- El 60% de las empresas tienen una nube híbrida y utilizan el marco para implementar cada aplicación en su ubicación óptima.
- El 28% de las empresas no cuentan con una nube híbrida, pero planean implementar una.
- Solo el 12% no tiene una nube híbrida y no planea implementar una en el próximo año.
Algunos de los usos más comunes para la nube híbrida incluyen migrar cargas de trabajo o aplicaciones entre ubicaciones según la ubicación óptima para ellas; ejecutar partes de una aplicación en una ubicación y otras partes en una ubicación distinta; ejecutar el desarrollo, las pruebas y la producción en diferentes silos; tener niveles de almacenamiento y datos para datos antiguos o de archivo; y gestionar copias de seguridad y recuperación ante desastres, entre otras.
La buena noticia es que la infraestructura híbrida ofrece la misma experiencia operativa y de consumo en el centro de datos que la nube pública, al tiempo que satisface ciertos requisitos de seguridad, cumplimiento, latencia y costos. Y los sistemas de infraestructura convergente (CI) e hiper convergentes (HCI) pueden acelerar las iniciativas de nube híbrida.
Sin embargo, es importante revisar algunas características en las ofertas de los proveedores para asegurarse de elegir la mejor solución CI o HCI para su empresa; consideren, por ejemplo, si la convergencia es completa y compatible con su tecnología actual y la de otros proveedores o sistemas, si la infraestructura habilitada para la nube, si ofrecen automatización para una experiencia de operaciones similares en la nube, y no olviden las finanzas: un modelo de consumo en la nube bajo demanda tal vez sea lo más óptimo para su empresa.