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¿Quién le teme a IPv6 en Latinoamérica?
Para los ejecutivos de LACNIC, la baja aplicación de IPv6 entre los operadores de la región es el resultado de la unión de diversos factores, muy complejos de superar.
Aunque la mayoría de operadores de América Latina ya cuentan con la infraestructura necesaria para adoptar la sexta versión del Protocolo de Internet (IPv6), aún son pocos quienes la han adoptado y la ofrecen a sus clientes en sus portafolios de servicios. De acuerdo con cifras del Registro de Direcciones de Internet de América Latina y el Caribe (LACNIC), la cantidad de ASN latinoamericanos que actualmente ofrece IPv6 apenas llega al 27% del total.
“La implementación de IPv6 en la región se encuentra un poco atrasada en cuanto el número de usuarios que están navegando con este protocolo. En este caso, requerimos mayor impulso de los operadores, que ya deberían decidirse a ofrecerlo como parte de su oferta comercial tradicional”, comentó Oscar Robles, director ejecutivo de LACNIC, a SearchDataCenter en Español.
Básicamente, todos los dispositivos que se conectan a internet requieren una dirección IP única e irrepetible que, similar a las direcciones de las casas, permite que los servicios en línea lo ubiquen para entregarle los datos y la información que requiere el usuario.
Actualmente, la mayoría de equipos utiliza la versión 4 de este protocolo (IPv4). Esta acepta direcciones de 32 bits, con lo cual solo habría disponibles 4.294’967.296 direcciones en todo el mundo. Este número está a punto de alcanzarse, gracias al rápido incremento de dispositivos que se conectan a internet que se ha vivido en los últimos años.
En este sentido, IPv6 recibe direcciones de 128 bits, con lo cual amplía el número de direcciones IP a más de 340 sextillones. Así, la adopción de esta versión del protocolo comienza a ser una decisión estratégica para que los proveedores y operadores de servicios de conexión garanticen la conectividad a los equipos de todos sus clientes.
Por lo pronto, LACNIC y el CAF (Banco de Desarrollo de América Latina) adelantan un proyecto para concienciar sobre la situación de la región en el contexto mundial en cuanto al proceso de migración hacia IPv6, así como promover y favorecer el desarrollo de experiencias exitosas y generar evidencia para la toma de decisiones en el ámbito gerencial.
Justamente, los resultados iniciales de esta investigación fueron el punto de partida para LACNIC 24- LACNOG15, el encuentro más importante de empresas y regulación de Internet en la región, que se realizó en Bogotá (Colombia) durante la primera semana de octubre pasado.
Los retos de IPv6 en América Latina
Para los ejecutivos de LACNIC, la baja aplicación de IPv6 entre los operadores de la región es el resultado de la unión de diversos factores, muy complejos de superar. “Hemos hecho un estudio con CAF, en que inicialmente reconocimos algunos casos de éxito en su implementación en la región. Así podemos determinar qué ha funcionado y por qué lo ha hecho”, dijo Robles.
Justamente, como parte de su intervención en LACNIC 24- LACNOG15, Alejandro Acosta, ingeniero de LACNIC, puso como primera causa del retroceso a la dificultad para demostrarles a los ejecutivos de empresas de servicios de conexión sobre la necesidad de invertir en IPv6, que se une al miedo a fracasar en su implementación.
Para Acosta, como un pequeño error de configuración podría conducir a pérdidas económicas considerables, las empresas prefieren dilatar sus procesos de cambio antes que enfrentarse a los reclamos de clientes afectados o a la posibilidad de tener un servicio caído, durante la transición.
Según el estudio de LACNIC y CAF, este temor también se manifiesta entre los profesionales a cargo de las instalaciones, quienes no están dispuestos a asumir esos riesgos al interior de sus empresas. Ante todo, prefieren no exponer su imagen interna ante la posibilidad de presentar fallas, incluso si no hacen parte de su trabajo.
Otro de los grandes retos para la implantación de IPv6, según Acosta, se encuentra en el límitado acceso y difusión de casos de éxito. La falta de documentación obliga a que los operadores y empresas de internet deban ‘reinventarse’ la rueda en cada proceso de transición.
En este sentido, LACNIC ha comenzado un proceso de recopilar esos datos que permitan que las organizaciones tengan guías precisas que les ayuden a minimizar los riesgos, al tiempo que promueve la generación de contenidos adecuados al nuevo protocolo.
“Aunque al usuario final aún no le ofrecen la posibilidad de navegar en IPv6, la cantidad de contenidos que está a disposición de los usuarios en la región también es significativo. Países como Perú, Ecuador, Brasil o Colombia están haciendo cosas muy interesantes en el despliegue, aunque aún no hay tráfico relevante que lo reciba”, comenta Oscar Robles, de LACNIC.
Si bien el CAF identificó otro reto en la falta de liderazgo de los gobiernos para promocionar y generar políticas de promoción de IPv6, para Robles ya pasó el momento en que el apoyo estatal era una clave. “Ahora solo podemos pedirles que lo promocionen en sus propias redes”, concluye el ejecutivo.