El Perú está avanzando en su viaje hacia la digitalización de procesos y usos de nuevas tecnologías. Se está dando un cambio importante en el proceso de transformación digital (TD) del Estado en los últimos tres años, enfatiza en todas sus presentaciones Marushka Chocobar, secretaria de Gobierno y Transformación Digital (Segdig). Pero aún nos falta bastante camino por recorrer, advierte Fernando Grados, director de la consultora Dominio Consultores.
Como prueba del progreso están los indicadores internacionales: el Índice de Desarrollo y Gobierno Digital de la ONU 2022 muestra que el Perú está en el puesto 59 de 193 economías, un avance de 12 posiciones, superando a México y Colombia. Y en el Ránking de Gobierno y Tecnología del Banco Mundial, que involucra también al sector privado, llega al puesto 14 de 198 economías. Eso significa que ha saltado 29 posiciones, llegando a ser el segundo más alto de la región, por encima de Uruguay, Colombia y Chile.
Dado el marco normativo, cada entidad peruana es responsable de sus avances en la implementación de los objetivos y políticas diseñadas por la Segdig. Al cierre de febrero del 2023, en los ministerios (que forman parte del Poder Ejecutivo) se observa el mayor avance, con un cumplimiento al 100 % en la conformación del comité y el líder del proceso, mientras que hay un 89 % de avance en la elaboración y aprobación de su Plan de Gobierno Digital. A nivel de gobiernos regionales, el avance en dicho plan pasa a 72 %, pero a nivel de municipalidades o gobiernos locales cae a 14 %. Las empresas estatales están a un 44 %.
¿Y cómo estamos en el uso de la inteligencia artificial (IA)? Según el Índice de Inteligencia Artificial publicado por Oxford Insights, que clasifica a las economías según el grado de preparación de sus gobiernos para utilizar la IA en los servicios públicos, el Perú subió 30 posiciones frente al 2021 y llega al puesto 61 de 181 países, con una calificación por encima de la media global.
Si bien la medición se realiza mirando al Estado como generador del marco adecuado para impulsar su uso gracias al diseño de estrategias, incluyendo la preparación de talento para sacarle provecho, también mide al sector privado en términos de preparación para aprovechar la IA, explicó Marushka Chocobar en su presentación en Café IT. Pero una cosa es estar “listos para”, y otra es estar ya en una fase de uso efectivo.
¿Existen mediciones sobre adopción de IA a nivel empresas en el país? Sí. La consultora RTM, en colaboración con la Escuela de Dirección - PAD de la Universidad de Piura, revela en su “Encuesta de Transformación Digital 2022” que el 19 % usa IA al interior de sus organizaciones, apenas un punto más que el 2021. En cambio, tecnologías como la analítica de datos alcanzan el 54 % y la nube llega al 53 %. Incluso la internet de las cosas (IoT) está en 27 % y blockchain pasó de 5 % en el 2021 a 9 % en el 2022.
El estudio, culminado en diciembre del 2022, advierte que el conocimiento en IA por parte de los directivos que lideran el proceso de transformación digital es, sobre todo, bajo/ muy bajo (27 %) y regular (42 %). Tan solo el 26 % tiene un conocimiento alto y un 5 % muy alto.
Las prioridades de inversión para 2023/2024, según el reporte de RTM, siguen centradas sobre todo en aquellas tecnologías que más se están implementando, es decir la nube y la analítica de datos. Aun cuando 22 % ve como uno de sus principales problemas tener muchos datos en papeles y 49 % siente que no usan de forma provechosa todos esos datos que tienen, la necesidad de inversión en IA recibe una puntuación de 3,4 sobre 5.
A nivel de sectores, la inversión en IA sube a 3,8 puntos en las empresas mineras. Ellos no son los más avanzados en su implementación –están en 15 %, menos de la media del país– pero ya la tienen entre sus prioridades su adopción. El sector que más la ha implementado es el retail (29 %) y media/comunicaciones (27 %), superando a los servicios financieros (24 %) y agricultura/pesca (21 %). El gobierno figura con 0 % de uso de IA, pero con 50 % en servicios de nube y 40 % en analítica de datos.
Fernando Grados lamenta que el avance a nivel del Estado sea tan disparejo. Mientras hay organizaciones como Sunat (recaudador de impuestos) o Sunarp (registros públicos) que van avanzando bastante en su transformación digital y en el uso de nuevas tecnologías, existen entidades como la policía o los municipios que están muy rezagados. Como marco conceptual y establecimiento de políticas se ha avanzado mucho, pese a la inestabilidad política y los continuos cambios de funcionarios, pero falta en la orquestación del trabajo en conjunto. “La Segdig deberá cambiar de estrategia para hacerlo más masivo, de lo contrario no se habrá logrado mucho”, comenta.
En el ámbito corporativo hay avances, pero continuamos siendo sobre todo receptivos e implementando el uso luego de ver casos ya exitosos de empleo, afirma Grados. Existen en el país los dos tipos de empresas, las reactivas y las proactivas, pero este segundo grupo sigue siendo reducido. “Hemos pasado de arrastrarnos a gatear. Aún nos falta mucho por andar”, advierte.