goodluz - stock.adobe.com

El trabajo híbrido, el modelo que funcionó y se consolidó en Brasil

Con la pandemia del coronavirus controlada, las empresas brasileñas están volviendo lentamente al trabajo presencial o adoptando como definitivas las medidas de flexibilización que posibilitan el trabajo híbrido, ya que este modelo ha funcionado muy bien en el país.

Según la encuesta "El trabajo híbrido en la práctica: cómo las empresas se han adaptado a las transformaciones aceleradas por la pandemia", realizada con más de 150 empresas de todo Brasil por la consultora inmobiliaria JLL –antes de la pandemia del COVID-19–, el 75 % de las empresas solo eran adeptas al trabajo presencial. Ahora, esa cifra se ha reducido al 33,6 %, con un 63 % que aplica modelos de trabajo híbridos y un 3,5 % que opta por quedarse totalmente en el modelo home office.

Incluso entre las empresas que ya tenían una política de trabajo a distancia (25 %), este proceso se ha intensificado. Antes de la pandemia, el 50 % de ellas exigían a los empleados que fueran a la oficina cuatro días a la semana. En la actualidad, este porcentaje se ha reducido al 5,6 % y, en su mayoría (19,6 %), han dejado la elección de la frecuencia a la discreción de los equipos.

Dificultades superadas

Según el 43,3 % de los entrevistados, las incertidumbres relacionadas con la pandemia fueron la principal dificultad para la implantación del trabajo híbrido, seguida de las barreras culturales de los directivos (18,9 %) y de los empleados (13,4 %). Sin embargo, con el éxito de esta implantación, la mayoría acabó promoviendo cambios en sus instalaciones para adaptarse al nuevo modelo: el 52,3 % de las empresas cambió el diseño o la distribución de sus espacios, que ahora cuentan con menos puestos de trabajo, más puntos de bienestar –salones y salas de convivencias– y mayores zonas para comer.

Google confirma esta tendencia

Si antes de la pandemia el trabajo remoto o híbrido parecía algo propio de las startups que querían ser modernas, ahora el escenario es diferente. Según una encuesta realizada por Google Workspaces, en colaboración con IDC, el 56 % de los empleados ya considera que el modelo híbrido es la nueva realidad en el país.

El estudio de 2022 muestra que la adopción del modelo híbrido creció 12 % respecto a la edición de 2021, quitándole espacio a los modelos puramente a distancia (19 % frente al 27 % en 2021) y presencial (25 % frente al 29 % en 2021).

Otro punto interesante que plantea la encuesta es cómo el modelo híbrido también se ha establecido ya como definitivo por parte de la mayoría de las empresas: el 85 % de los encuestados así lo afirma, más del doble del 41 % registrado en 2021.

La visión más positiva del trabajo híbrido también está influyendo en la elección de carrera de los profesionales. El 65 % de los presenciales cambiaría su actual empleo para trabajar de forma híbrida manteniendo beneficios y salarios. En el caso de los que solo están a distancia, esa tasa es del 54 %.

Nuevos hábitos, nuevas leyes

El cambio en el modelo de trabajo implicó un cambio en la forma de realizar varias funciones, lo que provocó que millones de trabajadores que realizaban sus tareas en computadoras en edificios corporativos convirtieran sus propios hogares en oficinas privadas.

Según un estudio elaborado por la Fundación Instituto de Administración (FIA), el 46 % de las empresas que operan en el país adoptaron el trabajo a distancia durante la pandemia, y el mayor porcentaje se encontró en el sector de los servicios hospitalarios (53 %) y la industria (47 %). Entre las grandes empresas, la tasa de las que colocaron a sus empleados en régimen de oficina en casa fue del 55 %; entre las pequeñas, del 31 %. Y un tercio de los empleadores (33 %) ha adoptado parcialmente el trabajo a distancia, válido solo en determinados días de la semana.

Datos divulgados por el Instituto de Investigación Económica Aplicada (Ipea), indican que el 11 % de los trabajadores activos en Brasil ejercieron sus actividades profesionales a distancia durante el período de la pandemia. En ese momento, el país contaba con 74 millones de empleados, de los cuales 8,2 millones trabajaban en home office. La mayoría son de la región del sureste, blancos y con estudios universitarios.

La Ley sobre el home office en Brasil establece que:

  • El teletrabajo o trabajo a distancia se define por la prestación de servicios realizada fuera del entorno empresarial, utilizando las tecnologías de la información y la comunicación, ya sea en el modelo híbrido o totalmente a distancia.
  • El home office se diferencia del trabajo externo porque se caracteriza por una rutina de trabajo totalmente independiente de un espacio corporativo.
  • La contratación se realiza en función de los puestos o las actividades.
  • Los empleados que trabajan a distancia en el extranjero están protegidos por la Consolidación de las Leyes Laborales de Brasil.

Ipea también ha publicado un estudio que muestra que una de cada cuatro personas podría trabajar a distancia en Brasil. El estudio muestra que 20,4 millones de brasileños, que representan el 24,1 % del total de la población ocupada del país, tienen condiciones para adoptar la modalidad. También, según el estudio, la mayoría de los trabajadores que pueden desarrollar actividades a distancia son mujeres (58,3 %); de raza blanca (60 %); con estudios superiores (62,6 %); y con edades comprendidas entre los 20 y los 49 años (71,8 %).

Ante la adopción definitiva del trabajo a distancia, nació la necesidad de regular la modalidad de trabajo, dando seguridad a los profesionales que trabajan en régimen de CLT o con contratos formales de servicios. La idea era evitar posibles conflictos entre empresarios y trabajadores y, en septiembre de 2022, se sancionó la Ley 14.442/22, que regula el teletrabajo. Publicada en el Diario Oficial de la Unión, la norma sucede a la Medida Provisional (MP) 1.108/22, aprobada por el Congreso Nacional con vetos y enmiendas.

Uno de los puntos de la nueva legislación se refiere a la definición de la modalidad. La ley define como teletrabajo o trabajo a distancia la prestación de servicios realizada fuera de la empresa, con el uso de las tecnologías de la información y la comunicación, que puede ser totalmente a distancia o híbrida, y no puede ser considerada como trabajo externo. La contratación puede producirse por tarea o por producción y las especificaciones del servicio en esta modalidad deben figurar en el contrato individual de trabajo.

La ley también define que la carga diaria de trabajo a distancia debe considerar el "tiempo de descanso legal". Esto significa que, el trabajador, aunque trabaje fuera de los locales de la empresa, tiene derecho a una pausa, que debe incluirse en la jornada laboral. Si el profesional trabaja un turno de ocho horas, debe tomar 60 minutos de descanso.

La legislación permite que los becarios y aprendices también puedan trabajar en modo de home office y, en el caso de los empleados con discapacidad o que tengan hijos o bajo su tutela niños hasta los 4 años, esta modalidad se convierte en prioritaria.

Investigue más sobre Estrategias de TI