El legado poscovid para las empresas en Brasil
La permanencia del trabajo remoto como modalidad laboral, el auge del enfoque en la experiencia del cliente y el comercio electrónico, y la importancia de TI en una crisis son algunas herencias que dejó la pandemia en las organizaciones.
Cuando comenzó la pandemia de Covid, la principal duda en las empresas era cómo realizar sus actividades con los empleados encerrados en sus casas. El trabajo a distancia o home office, hasta entonces visto con recelo, fue elevado a la condición de modalidad por excelencia y los empresarios de todo el mundo vieron caer muchos mitos.
En Brasil no fue diferente. Según la Pesquisa Nacional por Amostra de Domicílio (Pnad) Covid-19,, divulgada por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE), en 2020, cerca de 8,2 millones de brasileños trabajaban a distancia. Ahora, con la vacunación alcanzando niveles elevados –más altos, incluso, que en países como Estados Unidos– y la relajación de las restricciones, muchas empresas brasileñas están empezando a reanudar gradualmente las actividades presenciales. Sin embargo, una cosa es segura: nada será como antes.
El trabajo desde casa funciona
Si en 2019 le hubiera preguntado a alguien si el trabajo remoto es una opción viable, lo más probable es que la respuesta fuera «no». Primero, porque faltaban herramientas para ello. Además, no existían leyes que regularan este tipo de servicios.
Desde el momento en que el trabajo a distancia dejó de ser una opción para convertirse en una necesidad, las organizaciones tuvieron que reinventarse para sobrevivir. Las nuevas tecnologías centradas en el trabajo a distancia se desarrollaron sobre la marcha y se adoptaron con una rapidez inimaginable en los tiempos anteriores a la pandemia.
Hoy en día, tanto los empresarios como los empleados ven una serie de ventajas en esta modalidad, como, por ejemplo, el ahorro de tiempo en los desplazamientos, la retención de talentos de otras regiones y una mayor proximidad con la familia. También señalan algunas desventajas, como la importante disminución de la socialización y de la motivación en la gestión de la fuerza laboral (WFM, por Working Force Management).
Independientemente de la modalidad de trabajo (a distancia, en persona o híbrida, con empleados alternando entre la prestación de servicios en persona y el formato a distancia) que cada organización adoptará en la pospandemia, una cosa es segura: se enfrentarán a la resistencia y tendrán que encontrar soluciones capaces de generar compromiso por parte de los empleados, que prefieren las alternativas que más les convengan.
Compromiso y buen gobierno
Según los expertos en RR.HH., contar con un entorno de trabajo agradable en el que los empleados puedan hablar, reír, mostrarse y transmitir ánimos y emociones es un activo muy importante, tanto para la empresa como para las personas que trabajan en ella. Las formas de conseguirlo en el trabajo presencial son relativamente bien conocidas, pero en el trabajo a distancia el reto es mayor, por lo que las empresas deben invertir en tecnologías que ayuden a la salud mental y emocional de sus trabajadores y mejoren la gobernanza. Solo así tendrán equipos más comprometidos, proactivos e innovadores.
Un camino sin retorno
En el propio ámbito empresarial, muchas de las innovaciones surgidas durante la pandemia pasaron a ser relevantes para la cultura organizativa de las empresas brasileñas. Enlistamos las principales:
- Comercio electrónico. con la restricción de la circulación de personas, las ventas en línea cobraron aún más fuerza y las empresas que aún no utilizaban el entorno digital tuvieron que replantearse sus estrategias. Se descubrió el potencial del comercio electrónico, así como sus facilidades y, por lo tanto, la tendencia es que crezca cada vez más, con mayores inversiones por parte de los minoristas que encontraron en este modo de operación la forma de sobrevivir y destacarse durante los últimos meses.
La realidad aumentada (AR) y las soluciones de visión por computadora, por ejemplo, han ofrecido una mejor experiencia de compras a los consumidores, que han podido ver las características de los productos con más detalle e incluso personalizarlos. Todo ello desde la seguridad de su propio hogar y con muchas opciones de entrega - Experiencia del cliente. El 2021 fue definitivamente el año de la experiencia del cliente (CX). Su demanda nunca había sido tan alta, y esto se debe principalmente al cambio de comportamiento de los consumidores. Más que comprar un producto o servicio, ahora se buscan otros atributos en las marcas que convenzan y otorguen la seguridad de que se está realizando una buena transacción.
La evolución de la atención al cliente ha sido exponencial, y las empresas han situado al cliente en el centro del negocio, creando acciones para ofrecer un servicio humanizado, o al menos con la intención de cubrir las necesidades más básicas. - Cobots: Un cobot, o robot colaborativo, es un robot destinado a la interacción directa entre robots y humanos en un espacio compartido, o en el que humanos y robots están muy cerca. Pueden asumir fácilmente tareas repetitivas, sucias o peligrosas. Así, la mano de obra que antes se destinaba a alimentar a las máquinas puede asumir funciones en las que las habilidades y la inteligencia humanas son realmente importantes.
Según una investigación de A3 Robotics, una asociación que fomenta el avance de la automatización robótica, en el año 2027, los robots colaborativos representarán el 29 % del mercado mundial de robots industriales. Esto será posible gracias a los distintos niveles de colaboración entre ellos y los humanos que permiten automatizar tareas antes inalcanzables para los robots convencionales.
La importancia del área de TI
La pandemia hizo que las organizaciones fueran más conscientes de la importancia del área de TI. Sin un departamento competente y cualificado, sería sencillamente imposible implantar las soluciones que exigía el nuevo orden, ya fuera una simple aplicación de comunicación o una gran granja de servidores que diera servicio a millones de operaciones en la nube.
Las empresas tuvieron que ajustar sus presupuestos para aprovechar las numerosas oportunidades generadas, pero, entre las lecciones aprendidas, quizá la más importante, fue que es necesario adaptarse rápidamente a las circunstancias y esforzarse siempre por mantener el área de TI actualizada.