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Crecen los usos y la necesidad de seguridad de la nube empresarial
El uso transversal de la nube en las organizaciones está propiciando la escala, la flexibilidad y el uso de menores recursos informáticos en las empresas, pero aún conlleva algunos retos.
Existe consenso de que la pandemia del Covid-19 se convirtió en un estímulo decisivo para el aumento del interés y la inversión de las empresas en “la nube”. Un hecho que se confirma con las predicciones de un reporte de IDC que adelanta que, para 2025, en respuesta a los requisitos de rendimiento, seguridad y cumplimiento, el 60 % de las organizaciones implementarán servicios de nube, ya sea en sus instalaciones o en las de un proveedor de servicios.
Samuel Montupil, Defontana.
El uso de la nube a nivel corporativo es transversal y permite democratizar el acceso a la tecnología, ya que permite a las organizaciones escalar, flexibilizar y reducir sus recursos informáticos de manera eficiente y rápida de acuerdo a sus necesidades, sin tener que invertir en infraestructura física. Dentro de los diversos modelos de uso, destaca hoy la nube híbrida que integra los recursos de TI internos de una empresa con la infraestructura y los servicios de proveedores de nube de terceros, “ya sea para almacenar información o ejecutar aplicaciones en diversos entornos. No obstante, depende de los requerimientos corporativos si se opta por una nuble pública, privada, múltiple o híbrida”, dice Samuel Montupil, country manager en Defontana.
Nicolás Alvarez, Huawei Cloud.
Los expertos ven una tendencia de usar la nube como catalizador de proyectos de innovación, “así como una alternativa concreta para optimizar el gasto en TI, aprovechando la flexibilidad y dinamismo para probar escenarios, fallar rápido, reconstruir y luego avanzar hacia una puesta en marcha ágil. En adición, cada vez más empresas están migrando cargas de trabajo de misión crítica hacia la nube, aprovechando procesos de modernización y transformación de aplicaciones que permitan una transición desde entornos legados on-premises hacia la nube”, sostiene Nicolás Alvarez, director de Ecosistemas de Huawei Cloud.
Alexis Álvarez, NTT Data.jpg
Alexis Álvarez, líder de Gestión de Infraestructura & Servicios de Nube en NTT DATA Chile, explica que algunos de los principales usos hoy son el almacenamiento y el respaldo de datos en la nube, pues permite un acceso flexible y seguro a la información. “Además, se emplea la infraestructura como servicio (IaaS), la plataforma como servicio (PaaS) y el software como servicio (SaaS) para ofrecer soluciones innovadoras en el desarrollo, implementación y consumo de aplicaciones. Por otro lado, la nube híbrida se utiliza para combinar la innovación de la nube con recursos locales, optimizando así la infraestructura y la escalabilidad”, dice.
Novedades tecnológicas de los servicios empresariales en la nube
En los últimos años, los servicios empresariales en la nube han experimentado un desarrollo acelerado, destacando, el aprendizaje automatizado y el análisis de datos, que han sido una revolución para las empresas. Los servicios de aprendizaje automatizado en la nube permiten a las empresas aplicar algoritmos de inteligencia artificial a sus datos para obtener información valiosa y automatizar tareas complejas.
Iván Gutiérrez, SAS.
Iván Gutiérrez, arquitecto técnico de Nube en SAS, destaca la computación sin servidor (serverless). “Esta tecnología permite a las empresas ejecutar aplicaciones y servicios sin preocuparse por administrar servidores. Con la computación sin servidor, los proveedores de servicios en la nube se encargan de la infraestructura, el escalado automático y el mantenimiento, lo que permite a las empresas centrarse únicamente en el desarrollo de sus aplicaciones”, señala.
Otra tendencia es la computación perimetral (edge computing). “Esta tecnología permite procesar y analizar datos en el ‘borde’ de la red, cerca de los dispositivos, en lugar de enviar todos los datos a la nube. Esto mejora la latencia y reduce la dependencia de la conectividad constante con la nube”, detalla.
Los expertos sostienen que la promesa de una excelente experiencia en nube presiona a los proveedores a evolucionar rápidamente. En ello, la innovación es clave y permanente, al igual que la aparición de nuevas tecnologías y mejoras en los servicios.
Víctor Toscanini, Cisco Chile.
Víctor Toscanini, gerente de tecnología e ingeniería de Cisco Chile, indica que hoy lo más destacado es la capacidad de las nubes para entregar servicios que ayuden al rápido despliegue e implementación de aplicaciones. “Un ejemplo es Docker, que permite empaquetar aplicaciones y sus dependencias en entornos aislados y portátiles. Otro es Kubernetes, una plataforma para orquestar estos contenedores, simplificando la gestión de las aplicaciones a gran escala y entregando capacidades avanzadas de administración, de escala y de monitoreo de aplicaciones en entornos distribuidos”.
Otro elemento a destacar es la interoperabilidad, según señala Samuel Montupil, de Defontana. “Hoy los servicios empresariales en la nube tienden a transformarse en ecosistemas de soluciones que son capaces de conversar e interactuar entre sí, de manera nativa. Asimismo, la ubiquidad u omnicanalidad, aunque no son novedades, hoy están más presentes que nunca, al posibilitar que las soluciones en la nube estén disponibles en diversas plataformas y dispositivos”, apunta.
La seguridad de los datos empresariales en la nube
La seguridad de los datos empresariales en la nube también ha experimentado una evolución significativa a lo largo de los años, debido a lo importante que es para las distintas empresas que confían en esta tecnología. Los especialistas afirman que hoy sí hay más seguridad en las tecnologías de nube, debido a los avances en medidas como el cifrado, el control de acceso y la seguridad física. Además, del “cumplimiento normativo, donde los grandes proveedores de nube se rigen por una serie de regulaciones y estándares de seguridad específicos de diferentes industrias y regiones. Esto implica realizar auditorías, obtener certificaciones y proporcionar garantías de cumplimiento normativo para tranquilidad de las empresas”, agrega Iván Gutiérrez de SAS.
Una opinión coincidente tiene Alexis Álvarez, de NTT DATA Chile, quien indica que el tema de la seguridad de los datos empresariales en la nube ha experimentado una notable evolución. “Los proveedores de servicios en la nube han implementado medidas de seguridad avanzadas, como el análisis de comportamiento y la detección de amenazas basada en inteligencia artificial, para proteger los datos de manera más efectiva. Asimismo, se ha innovado en herramientas de gestión de identidad y acceso, garantizando una autenticación sólida y un control de acceso granular”, dice.
Por supuesto, el factor humano no puede quedar fuera. La mirada de seguridad engloba algo más allá que lo meramente técnico. Si bien los distintos jugadores del mercado se han acogido a certificaciones y normativas internacionales, tales como ISO 27001, GDPR y PCI, entre otras, se han realizado también importantes inversiones en el desarrollo de soluciones propias de seguridad, que minimizan el riesgo al que están expuestas las empresas. “De la misma forma, existe hoy un enfoque particular en concientizar sobre las mejores prácticas en torno al manejo de plataformas cloud, pues el factor humano sigue siendo una piedra angular que complementa la componente técnica de seguridad y privacidad de los datos”, indica Nicolás Alvarez, de Huawei Cloud.
Rodrigo Acevedo. Entersoft.
“La ciberseguridad es un factor elemental. Los empleados deben ser parte del éxito. Y para ello, deben estar concientizados de que los datos son relevantes y, por lo mismo, hay que evitar la fuga de éstos”, enfatiza Rodrigo Acevedo, gerente general de Entersoft.
Los desafíos que vienen
Las compañías enfrentan diversos desafíos al momento de adentrarse en el universo de la nube o al profundizar en su uso operacional. Entre estos destaca el cumplimiento normativo, es decir, cumplir con regulaciones locales y estándares específicos de la industria al almacenar y procesar los datos empresariales en la nube. También es importante la disponibilidad y el tiempo de inactividad, sobre todo cuando se manejan aplicaciones críticas. Por eso las organizaciones deben considerar planes de contingencia para mitigar el impacto de cualquier tiempo de inactividad.
“Otros puntos trascendentales son la integración y migración, ya que mover aplicaciones y datos existentes a la nube puede ser gran un desafío. Las organizaciones deben evaluar cuidadosamente sus sistemas actuales y considerar cómo se integrarán y migrarán a la nube sin interrupciones operativas significativas. Además, es relevante el factor costo. Si bien la nube empresarial puede ofrecer flexibilidad y escalabilidad, también puede conllevar costos variables (como, por ejemplo, la transferencia y almacenamiento de datos). Es importante planificar y gestionar adecuadamente sus recursos en la nube para evitar gastos excesivos y optimizar la relación costo-beneficio”, explica Gutiérrez, de SAS.
Otro reto es la seguridad de los datos, que debe ser parte fundamental de las soluciones y nunca una ocurrencia tardía. Muchas empresas asumen que la seguridad en los servicios de nube es suficiente para mantener la protección de datos, y no es así.
Víctor Toscanini, de Cisco Chile, enfatiza que las compañías deben garantizar que sus datos estén protegidos contra amenazas como violaciones de seguridad, ataques cibernéticos y accesos no autorizados, cumpliendo además con las regulaciones de privacidad y protección de datos.
Agrega que las soluciones deben funcionar en todos los entornos de los clientes, lo que crea la necesidad de interoperabilidad. “Es decir, la posibilidad de migrar datos y aplicaciones en ambientes híbridos (nube y on premise) sin volverse dependientes de un proveedor por obligación o bloqueo de servicios. Es esencial planificar y ejecutar adecuadamente las implementaciones/migraciones y, por sobre todo, asegurar que las aplicaciones legadas funcionen sin problemas en estos entornos de la nube”, concluye.
Desafíos del uso empresarial de la nube
La adopción de la nube empresarial conlleva desafíos significativos que requieren atención adecuada, explica Alexis Álvarez, líder de Gestión de Infraestructura & Servicios de Nube en NTT DATA Chile. Estos desafíos incluyen:
- Cambio cultural y capacitación: Adoptar la nube implica cambiar la forma en que las organizaciones operan y piensan en torno a la tecnología. Es necesario fomentar una mentalidad de innovación y cambio, y capacitar a los empleados en las habilidades necesarias para utilizar eficazmente la nube.
- Repensar los modelos de negocios tradicionales: La adopción de la nube ofrece la oportunidad de repensar y transformar los modelos de negocios tradicionales hacia modelos basados en plataformas. Esto implica identificar nuevas formas de generar valor y establecer alianzas estratégicas con otros actores de la industria para crear y ofrecer servicios innovadores a través de plataformas digitales.
- Integrar tecnologías emergentes: La nube empresarial permite aprovechar tecnologías emergentes como inteligencia artificial, aprendizaje automatizado, analítica avanzada y realidad aumentada/virtual. Sin embargo, la integración efectiva de estas tecnologías en la nube puede ser un desafío complejo que requiere una comprensión profunda de sus capacidades y cómo se pueden aplicar a los casos de uso específicos.
- Gestión de datos masivos: Con la adopción de la nube, las organizaciones tienen acceso a grandes volúmenes de datos. La gestión efectiva de estos datos masivos es esencial para extraer información valiosa y generar ideas innovadoras. Esto implica implementar estrategias de gobernanza de datos, análisis y almacenamiento eficientes.
- Seguridad y privacidad: A medida que las organizaciones buscan innovar en la nube, es esencial tener en cuenta la seguridad y la privacidad de los datos. Se debe implementar medidas de seguridad que permitan la innovación de manera segura, al tiempo que se cumplen los requisitos de protección de datos y las regulaciones pertinentes.
“En resumen, la adopción de la nube empresarial plantea desafíos que van desde el cambio cultural, hasta la integración de tecnologías emergentes y la gestión de datos masivos. Superar estos desafíos requiere una visión de innovación en el uso de cloud, donde se repiensan los modelos de negocios tradicionales y se fomenta una cultura de innovación. Además, es fundamental capacitar a los empleados y establecer asociaciones estratégicas con proveedores de servicios en la nube para aprovechar al máximo el potencial de la nube y lograr la transformación y el crecimiento empresarial deseados”, afirma.
