Production Perig - stock.adobe.c
Ciberseguridad marcará la nueva normalidad laboral digital en América Latina
Colombia es el país latinoamericano más listo para el home office, 45% de los colombianos se dice con la habilidad para realizar su trabajo de forma remota.
No es un secreto para nadie que los gobiernos y empresas de Latinoamérica se enfrentan a los retos que trae consigo la pandemia del Covid-19 para poder ofrecer sus servicios a la población. La digitalización de esos servicios podría mejorarlos mucho, sin olvidar el impacto directo en la estrategia de ciberseguridad.
Durante 2019, la consultora Frost & Sullivan realizó un estudio entre los empleados en el que les preguntaba si se consideraban capaces de trabajar de manera remota y, de acuerdo con los resultados en la región latinoamericana, Colombia es el país en el que existía mayor facilidad o habilidades para trabajar de forma remota con 45% de los encuestados; por el contrario, en Perú solamente el 21% de los encuestados podrían realizar teletrabajo; mientras que en México el 35% de los participantes se dijo listo para realizar home office.
En el sector gubernamental esta forma de trabajo representa una oportunidad debido al gran campo fértil que es. Por ejemplo, desde el 1 de junio, el gobierno de Perú implementó soluciones para que sus empleados pudieran trabajar remotamente en lo que resta del año y así sus servicios públicos siguieran en pleno funcionamiento.
Para realizar estas labores, de acuerdo con Frost & Sullivan, una de las herramientas que genera mayor confianza a los empleados son las herramientas de video, pues con ello se sienten más integrados a sus equipos de trabajo sin importar que se encuentren en locaciones alejadas entre ellos.
Mayor adopción, más retos de seguridad
En México, el Senado impulsó más la digitalización para seguir trabajando y sesionado, de acuerdo con Eduardo Rojas, CIO del Senado de la República Mexicana. “Ya veníamos haciéndolo desde antes y queríamos tener mayor rapidez en la adopción (de la digitalización), pero reza el dicho ‘ten cuidado con lo que deseas’, llegó la pandemia y los usuarios nos exigieron mejorar el funcionamiento de las soluciones tecnológicas”.
EL CIO del Senado explicó que el reto que representaba el trabajo remoto era lograr que las sesiones híbridas de las comisiones de la Cámara fueran exitosas, “ya que las diferentes presidencias deben estar presentes en el edificio legislativo y los demás senadores en remoto, esto nos obligó a trabajar e implementar soluciones, revelándonos la gran cantidad de retos que debíamos resolver.”
La ciberseguridad era quiza la mayor preocupación que existia en el equipo de TI del Senado, ya que pasaron de tener cero sesiones formales durante febrero pasaron hasta 1500 al mes de junio, por lo que Rojas añade que “los responsables de la estrategia digital debemos administrar los servicios y dar continuidad, además de aumentar la percepción de la importancia de ciberseguridad”. Por ello la solucion no se centraba en implementar más conexiones de redes privadas virtuales (VPN), pues a mayor número de conexiones el riesgo de ataques cibernéticos crece de manera paralela, “el cambio se aceleró y debemos aceptar los riesgos que trae consigo, como es estar expuestos a más ataques”.
Pero no solamente México se presentaron los problemas. En el cono sur la situación no difería mucho, en especial si se trata del sector salud.
Christian Peter Clausen, asesor para la Transformación Digital del Ministro de Salud y Protección Social de Colombia, mencionó que ellos tenían dos escenarios: “el ejercicio del Ministerio de Salud regulador, que debe estar al frente de todas la normas que atacan al Covid-19, con todos los servidores públicos que lo conforman y se encuentran trabajando de forma remota; por otra parte están los teleservicios, en los que el gobierno colombiano había estado realizando grandes esfuerzos para que los pacientes se montaran en ese barco.”
Pero al igual que en todos los demás países, el Covid-19 vino a cambiar todo el panorama, obligando a la gente a empezar a usar las teleconsultas. “Este crecimiento se dio hasta en un 500% y esperamos que estas tasas se queden de manera permanente. Son herramientas que llegaron para quedarse y potenciar a todas las regiones del país, hasta las más alejadas”, dijo Clausen.
El asesor del Ministerio de Salud y Protección Social sabe que “las barreras son muchas, digitalizar los procesos de una institución de salud no es fácil, sabemos que tenemos un problema de conexión y es un reto de capacidades económicas.”
Ciberseguridad para la nueva normalidad
Para Mario de la Cruz, director de Relaciones con Gobierno para Cisco América Latina, los retos que ha traído esta “nueva normalidad” se centran en que “se le pidió la cuarta parte de la población mundial estar en cuarentena, y así conectarse para trabajar, estudiar, comunicarse con sus seres queridos; esto en tema de ciberseguridad es muy complejo, pues es más difícil defender los dispositivos móviles fuera de las organizaciones, y en todas ellas, tanto públicas como privadas, sí veíamos un grado de adopción (de la digitalización) progresivo, pero no acelerado y forzado como ahora”, dijo.
De la Cruz ve un esquema híbrido que requiere cambios técnicos y legales, mismo que debe ser adaptativo, reposar en estrategias de estructuras empresariales, “con un profundo respeto por la transformación digtal a partir de esta crisis”. Con esto se espera que exista un equilibrio en la ciberseguridad en todas sus capas, datos, procesos, instituciones, y la capacitación de la gente con el fomento a las habilidades digitales.
Por su parte, Mauricio Moreno, director de Desarrollo de Negocio para el Sector Público en Cisco México, comentó que la aparición de este virus ha impactado a la totalidad de las actividades de la humanidad, “y los gobiernos no son la excepción, están experimentando la importancia de la transformación digital como catalizador, por ejemplo nosotros en Cisco hemos visto que nuestra herramienta de teleconferencia Webex a principios de febrero año tenia 1 millón de participantes en América Latina, hoy tiene 38 millones.”
Esta crisis ha dividido en tres a las organizaciones, mencionó Mauricio Moreno: las que ya transitaron por la fase de respuesta, en la que vieron las herramientas que les servirían, así como los procesos que se tenían que restaurar. Después está la fase de recuperación, en las que las actividades de mediano y largo plazo se empiezan a ver, aquí se empieza a evaluar el impacto y ya tener las herramientas para estabilizarnos. Finalmente, “posiblemente en un par de meses, venga la etapa de reinvención, donde el florecimiento de la innovación y el surgimiento de los modelos híbridos permiten un escenario evolutivo a largo plazo”, explicó Moreno.
Sin embargo, para poder alcanzar esa evolución se debe atender el tema de la cibeserguridad, pues estamos siendo rebasados. “Solo en el mes de abril, 75% de los dominios relacionados con el COVID fueron catalogados como maliciosos, lo que provocó el aumento de ataques oportunistas que vulneran los sistemas”, mencionó Moreno.
Christian Pêter Clausen dijo que el cuidado de la información es vital, pues es un activo muy importante, sobre todo en el sector salud. “En Colombia hemos trabajado para proteger los datos, todos estos ataques ponen en riesgo la información de toda la población colombiana. Hemos desarrollado el marco para seguridad digital y ciberseguridad.”
Esto ha puesto sobre la mesa reglamentación que debe regir en todos los países y los riesgos de ciberseguridad que enfrentan tanto el sector público como el privado. “Las compañías han entendido que la información es un activo que debe cuidarse, tal como se cuida el dinero; y en este sentido los hospitales están haciendo un trabajo excepcional para proteger los datos de los pacientes”, finalizó Clausen.