Brasil, una potencia en el uso de aplicaciones y dispositivos inteligentes

El principal uso: Las redes sociales

Entre los países desarrollados, el promedio mundial de uso de internet es del 90% de la población, este porcentaje baja al 60% entre los países emergentes. Las cifras de adopción de las redes sociales son del 67% para los países desarrollados y del 49% para los países emergentes.

Brasil se sitúa muy por encima de la media de los países emergentes, con una tasa de utilización de las redes sociales del 58%, incluso por delante de países desarrollados, como Japón y Alemania. Aun así, Brasil ocupó el tercer lugar en el ranking de países emergentes, detrás de México (66%) y Filipinas (59%). Entre las personas con altos índices de escolaridad, la adopción brasileña es una de las más altas del mundo: 85%. La cifra coloca a Brasil en el tercer lugar de la clasificación general, por detrás de México (90%) y Corea del Sur (86%). Argentina tiene el 84%.

Entre las personas con bajo nivel educativo, el uso de las redes sociales es del 36%, el mismo número que en Japón y superior al de Nigeria (10%), India (10%), Kenia (22%), Indonesia (23%), Filipinas (29%) y Túnez (30%).

Los brasileños usan smartphones tres horas por día al menos

Por increíble que parezca, los brasileños pasaron más de tres horas al día usando sus teléfonos celulares en 2018. Este promedio colocó al país en el quinto lugar en el ranking mundial de tiempo dedicado a este dispositivo. Los datos provienen del informe Estado de Serviços Móveis, elaborado por la consultora especializada en datos sobre dispositivos móviles App Annie, considerada una de las más completas del mundo.

Esta cifra abarca el tiempo que una persona se la pasa usando aplicaciones móviles. Los países que invierten mucho tiempo usando su teléfono inteligente fueron Indonesia, Tailandia, China y Corea del Sur. En el primero, la media superó las cuatro horas diarias. La lista consideró los datos de los clientes de teléfonos móviles con sistema operativo Android.

En comparación con 2016, el tiempo medio diario de uso de los smartphones creció un 50%. En el desglose por tipos de aplicaciones, las redes sociales concentran el 50% de las horas dedicadas a estos dispositivos, seguidas de los programas de reproducción de video (15%) y los juegos electrónicos (10%).

Según los autores del estudio, esta tasa de consumo se alimenta de "micromomentos acumulativos", en los que las personas revisan sus teléfonos móviles, como por ejemplo para comprobar los correos electrónicos entrantes, los mensajes o las actualizaciones en las redes sociales. "La naturaleza 'en tiempo real' de los dispositivos móviles ha permitido un crecimiento generalizado en este tipo de comportamiento de los consumidores", indica el estudio.

Las aplicaciones son un mercado en crecimiento

La encuesta también mapeó el tamaño del mercado de aplicaciones móviles. En total, el segmento movió $101 mil millones de dólares. El índice representa un aumento del 75% con respecto a 2016. China representó casi el 40% del gasto mundial. La expansión del mercado en el país casi duplicó el promedio mundial, alrededor del 140%. En Corea del Sur, las ventas aumentaron un 80% en el mismo período.

Con la mayoría de las aplicaciones disponibles de forma gratuita, el segmento más dinámico del mercado son los juegos electrónicos. La comercialización de estos programas se llevó el 74% del mercado mundial. Sin embargo, las aplicaciones que no son juegos también ganaron espacio, pasando de $3,700 millones de dólares en ingresos en 2013 a $19,700 millones de dólares en 2018.

Los servicios líderes del mercado fueron Netflix, Tinder, Tencent Video, iQIYI y Pandora Music. Los ingresos se concentraron en tres grandes centros: China, con un 32% del gasto en empresas con sede en el país; Estados Unidos, con un 22% y Japón, con un 21%. Las cinco empresas más grandes del mundo fueron Tencent (China), NetEase (China), Activision Blizzard (Estados Unidos), Bandai Namco (Japón) y Net Marble (Corea del Sur).

Consecuencias de un mayor consumo de datos

En Brasil la intensa competencia de las operadoras y el mayor consumo de datos, derivado por el uso de aplicaciones dentro de los teléfonos inteligentes, generó un fenómeno destacado: la caída en las líneas en modo prepago.

La Anatel (organismo encargado de la regulación de las telecomunicaciones en el país) reveló el pasado 8 de febrero que entre diciembre de 2017 y diciembre de 2018, 7.2 millones de líneas celulares fueron desconectadas en Brasil. Esto representa una caída del 3.08%, que puede no parecer tan grande, pero que tiene impacto principalmente en el mercado de prepago.

Según datos del organismo regulador, en el periodo se desconectaron 18.9 millones de líneas de prepago, lo que supone un descenso del 12.7%. Al mismo tiempo, el sector del postpago ha captado 11.6 millones de nuevos clientes, con un crecimiento del 13.2%. Este movimiento, sin embargo, no fue suficiente para contener la pérdida de líneas activas.

Sólo en cuatro estados brasileños hubo aumentos en el número total de clientes: Amapá (+2.72%); Amazonas (+1.93 %); São Paulo (+1.03%) y Espírito Santo (+0.31%). El balance fue negativo en todas las demás unidades de la federación.

Entre las grandes empresas, Vivo se mantiene como el mayor operador de telefonía móvil del país, con 73.1 millones de líneas activas (31.91% del mercado) en diciembre de 2018. Claro ocupa un distante segundo lugar, con 56.4 millones de clientes (24.61% del mercado); tercero, Tim, con 55.9 millones de clientes (24.39% del mercado); y, en cuarto lugar, Oi, con 37.7 millones (16.44% del mercado).

También se realizó un análisis entre las tecnologías utilizadas por estas líneas móviles. 4G ya es utilizada por el 56.64% de todos los clientes de telefonía móvil en Brasil, con más de 54.7 millones de usuarios activos. 3G, en caída, tiene el 23.8% de las líneas activas, y 2G sigue siendo la red más utilizada por el 10,8% de los clientes brasileños. Cabe destacar que existen 19.7 millones de líneas móviles más dedicadas a la comunicación máquina a máquina (M2M).