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Tres pasos para empezar a usar herramientas de IA sin morir en el intento
Con el uso de IA y la automatización, las empresas serán capaces de tomar decisiones basadas en datos fiables o conseguir información para describir lo qué está pasando en un flujo de trabajo determinado.
Actualmente, medianas y grandes empresas aún siguen batallando al momento de implementar y usar nuevas tecnologías, especialmente la inteligencia artificial (IA) y el aprendizaje automático. La mayoría de las veces debido al desconocimiento de los flujos de trabajo que pueden beneficiarse de estas implementaciones dentro de los modelos de negocio de las organizaciones, lo que hace casi imposible crear una red de flujos de trabajo totalmente digital, afirma ServiceNow.
La empresa de flujos de trabajo digitales comparte tres consejos para poder identificar las áreas donde estas herramientas pueden tener el mayor beneficio y hacer que el proceso de implementación no sea un dolor de cabeza, tanto para los equipos de TI, como para los colaboradores y clientes que se beneficiarán con su uso.
1. Mire el panorama completo
Primero que nada, es importante quitarse de la cabeza el pensamiento recurrente de que la inteligencia artificial es complicada y solo las “mentes más brillantes” pueden trabajar con ella. La mejor manera de descartar esas ideas es ver el espectro completo que abarcan las soluciones potenciadas por IA y aprendizaje automático (machine learning o ML).
Gracias a la implementación de estas tecnologías, dice ServiceNow, las empresas son capaces de tomar decisiones basadas en datos fiables o conseguir información para describir lo qué está pasando en un flujo de trabajo determinado y, por el otro, la predictibilidad nos ayudará a saber lo que potencialmente puede pasar con los datos recolectados, que puede ser: prevención de riesgos, detección de fallos con anticipación y brechas de vulnerabilidad para los equipos de ciberseguridad, o evitar problemas en la cadena de suministro, etc.
2. Usos prácticos en tareas comunes
La mala percepción que existe sobre la IA muchas veces lleva a pensar que solo funciona para tareas complejas que necesitan cientos o miles de datos para funcionar adecuadamente; sin embargo, la realidad es más sencilla de lo que parece.
De acuerdo con ServiceNow, uno de los primeros pasos para poder adaptar la IA dentro de cualquier organización es asignar algunas tareas que pueden parecer sencillas, pero que si se automatizan y se logra crear flujos de trabajo digital que realmente funcionen, pueden generar beneficios que de otra manera serían imposibles de alcanzar. Por ejemplo, el registro y acceso diario al estacionamiento de los colaboradores, algo que, si bien puede sonar muy simple, se puede automatizar de manera inteligente a través de datos analíticos y una base con información actualizada, con los cuales se podrá detectar quien entra y sale del lugar, ahorrando tiempo, minimizando los errores humanos y reduciendo el riesgo de tener algún problema de seguridad.
3. Decida dar el primer paso
Tomar la decisión de invertir o no en nuevas tecnologías puede ser un paso complicado de dar y no se puede tomar a la ligera. Sin embargo, hay acciones que, como líder de TI, se pueden ir adelantando para que el proceso sea mucho más sencillo.
“Anotar e identificar las decisiones claves que se deben tomar en este proceso será fundamental. Por ejemplo, saber qué flujos de trabajo son más propensos a automatizarse a través de IA, tener métricas claras de cómo mejorarán los procesos, y tener un panorama de la inversión y el retorno de ésta al mediano y largo plazo son pasos simples, pero que ayudarán de manera fundamental a la implementación de estas nuevas tecnologías”, sugiere ServiceNow.
La empresa señala que la inversión en nuevas tecnologías tiene un impacto tan profundo y cambia tan drásticamente la forma en que los flujos de trabajo funcionan, que “se ha convertido en una norma para toda empresa que quiera mantenerse competitiva en cualquier industria”.